Mi madre se llamaba Serafina y mi padre era Abel. Se habían conocido en las jornadas literarias de la facultad de ciencias. Él, estudiante de matemáticas; ella, de geología. Caracteres muy diferentes, no os lo negaré, pero en ilusión y alegría similares. No tardaron demasiado en casarse. Su primera hija, yo, vino al mundo siendo ellos aún muy jóvenes. Y el segundo y último vino en ese pacífico momento en que su única hija tenía edad suficiente como para cuidar de sí misma, como para permitir que los progenitores disfruten algo más de la vida, de su compañía y, ¿por qué no? del sexo. Y este último placer fue el que les fue a traer lo contrario a lo que mis trece años significaban para ellos. Lo que les llevó a atarse de nuevo a otra vida. A no ser, como querían, de nuevo libres.
13 comentarios:
Vale, ¿Entonces la historia comienza desde los trece años o desde los dieciocho? me estoy empezando a perder y solo llevamos 3 capitulos. jajaja
Pero me gusta. vamos a por el siguiente.
Un besazo mi niña.
Aquí estoy,
tengo una confusión parecida a la de Raúl,
aunque también es posible que "la desgracia" que nombras al final del segundo capítulo no tenga nada que ver con el tercero,
besos!, me quedo aguardando el cuarto.
No, no tiene nada que ver una cosa con la otra. Este capítulo es solo un flashback. La desgracia fue a los 18, y este nacimiento a los 13.
Tener un hermano cuando ya eres más mayor, siempre es díficil :/
Un beso enorme! ^^
Estoy en tus blogs interesantes!
GRACIAS, es un lujo, y más viniendo de ti :)
♥
Ya van quedando dibujados los personajes... ahora falta la acción. Intriga.
Empecé un relato nuevo, pero todavía no se que de qué va... es todo un misterio. Y es interactivo.
Saludos
Mucha gente prefiere sifrutar cada hijo en si y no una marabunta contínua!
Esto se pone interesante, a esa edad que tus padres esten atentos a otro hijo puede ser complicado...
:)
UAU! tengo ganas de saber que pasará.
Besos :)
Se pone interesante, creo que ese hermano será la clave. Me gusta.
No sé por qué no puedo comentar en los blogs por mi cuenta, pero vamos, que soy Blanca, ¿eh?
Un beso.
Ya le creo que se pone interesante! Y también creo que el hermano será la clave, estoy casi segura!
Un besote!
Joana
A pesar de que la desgracia ocurra, como tú dices a los 18, no puedo evitar pensar que este otro hijo va a marcar negativamente a la chica de 13 años. A ver como te desenvuelves :)
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