Isabel observaba minuciosamente cada detalle del voluminoso cuerpo que aquella mujer le estaba mostrando mientras cambiaba su postura repetidamente con tal de enseñarle todo lo que quisiera ver. No le cabía la menor duda de que se trataba de una persona muy joven, pero había algo en ella que no concordaba con la edad que confesaba su piel. Sin embargo, se concentró en continuar el escrutinio de su figura para intentar averiguarlo más tarde. Peinó su melena azabache y acarició con los dedos el perfil de sus senos, su cintura y sus caderas, y le apenó que ninguna otra persona hubiese gozado del privilegio de hacer ese recorrido antes. Mientras examinaba, despacio, la redonda figura que tenía desnuda ante sí, Isabel se sorprendió encontrándose con su mirada. Sin duda sus pupilas emanaban juventud, pero había unas hondas y oscuras marcas bajo ellas que solo podían pertenecer a alguien que había experimentado, durante un espacio de tiempo prolongado, el dolor. Isabel comprendió que su vida tenía que cambiar, así que alcanzó de un estante un pequeño bote y cubrió con maquillaje sus ojeras. Luego rodeó de un trazo negro el borde de sus ojos, barnizó de carmín sus labios y se enfundó en un vestido corto y ajustado. Cuando hubo acabado volvió a mirarse en el espejo y constató que seguía siendo la misma, pero más atractiva. Se prometió que esa noche iba a ser diferente, que la disfrutaría, y que iba a ser el principio de una nueva vida.
14 comentarios:
Hola guapa, siempre un lujo saber de tus letras, gracias por esta joya..queremos más..
Buena tarde, besos reales..
Como te haces de rogar últimamente, espero que sea por algo bueno.
Este relato me ha recordado una frase que dice mi chica que es:"Cuanto más jodida estoy más me pinto" Creo que eso es lo que le pasa a tu protagonista.
Un besazo.
Al principio pensaba que eran dos, así que me ha gustado el desvío inesperado.
Por fin me he pasado por aquí!
Espero que estés bien ;)
Besitos x x x
Wow me encantó! escribís muy bien :)
Me ha fascinado.
En esos instantes -que pueden ser muy largos- donde uno es capaz de mirarse (recorrerse) es donde comienzan los nuevos tiempos.
Allí van a parar las semillas del mañana.
Me encanta la manera en la cual está escrito este texto; además de la poesía, el final es dulcemente inesperado.
Un gigantesco abrazo desde Argentina; que lindo volver a leerte.
Completado un ciclo doloroso se abren dos vertientes: o el abandono o la renovación... sin duda Isabel escgió la opción más difícil, pero también la más satisfactoria, la más saludable... Hermosa forma de escribir la tuya. Besos.
Alucinante.
También es bueno volver a leerte, y sobretodo así... se nota que estás cambiando, que estás creciendo, y que seguís siendo vos.
Un abrazo enorme, espero tener continuaciones pronto para disfrutar.
:)
pdt: ¿Sacaste al pato? ya no lo veo. Y el fondo cambió también, ¿no? Bien por las renovaciones.
Me gusta, me gusta. Ojalá que Isabel de verdad consiga darle un cambio a su vida y borrar esos rastros de dolor. Espero más, claro.
Un beso,
y sonrisas.
Respondiendo a tu pregunta en mi entrada... yo las prefiero más complejas. Aunque sea en un caso o en el otro, el hecho que la respuesta no sea como uno pensaba, desplaza. Aun asi, estoy segura que más complejas. Mi mente entiende mejor la complejidad que la sensillez.
Besoo!
Un final completamente inesperado, genial.
Muy buena la descripción de los sentimientos de la protagonista.
Me gustó mucho.
Saludos.
Primero leí 1- Veo, y subí al 2-Recuerdo, y ahora bajo a poner el comentario y me ha dado la risa... claro que ha sido el principio de una nueva vida.. juas, juas... Bueno, bueno... muy bueno... Bss
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